Nacimiento S. Social
En 1883 se crea la Comisión de Reformas Sociales. En 1900 el primer seguro social (Ley Accidentes de Trabajo). En 1903 el Insti- tuto de Reformas Sociales y en 1908 el INP (hoy INSSS). En 1919 el Retiro Obrero (luego SOVI). En 1920, Seguro de Maternidad. En 1931 el seguro de paro forzoso. En 1935 la Inspección de Seguros Sociales. En la déca- da de los 70 (Ley de Seguridad Social) se termina de configurar el actual sistema.
Con la llamada “crisis” de los años 70 empieza el cuestionamiento del “Estado del Bienestar” y en los 80 (con los Acuerdos de la Moncloa y con la llegada del PsoE en el estado y del Pnv en Hegoeuskalherria) se inicia su desmantelamiento y, a la vez, el intenso bombardeo de reformas laborales. Las recurrentes “crisis” (craks, recesiones, de- crecimientos, burbujas, desequilibrios,…) profundizan esta estrategia. No son “crisis”, compañera, es capitalismo.
Las sucesivas reformas laborales y de seguridad social, han tenido como objetivo erosionar los derechos laborales y de seguridad social alcanzados, disminuir nuestro poder de clase como capacidad para imponer nuestros intereses (salario directo y “salario” social). Su finali- dad: desviar la riqueza acumulada del bloque dominado (clase obrera y capas populares) hacia el bloque dominante.
Y las pensiones es un buen campo de dispu- ta. Desde mediados de los años ochenta, las sucesivas reformas se han orientado hacia la contención y disminución del gasto de pensiones y hacia la incentivación de planes privados de jubilación, y la única “mejora” es la protección de colectivos más vulnerables en el momento de llegar a la vejez. Por la vía de los hechos, caminamos hacia un estado meramente asistencial (rentas de supervivencia).
DESMANTELAMIENTO DE LAS PENSIONES ( VER CUADRO)
Las nacidas de 1965 a 1985, las más perjudicadas (30/40% de pérdida). Las nacidas posteriores… lo tienen crudo.
A esto hay que añadir un auténtico rosario y goteo de recortes: Endurecimiento acceso a invalideces; regulación de Planes y Fondos de Pensiones; incentivos y exencio- nes fiscales a tope; restricciones y recortes en jubilaciones anticipadas y parciales (coeficientes reductores) y contrato relevo; desaparición de la invalidez provisional; recortes en ILT y desempleo; eliminación de los “días cuota” de pagas extras para los cómputos;…
Y también está la “Reforma constante, silenciosa y encubierta”: las cotizaciones (salarios) han subido mucho más que las pensiones máximas. Si las bases de cotización mínimas y máximas van incrementándose y año a año crece el número de jubilados con pensión máxima prácticamente congelada… ¡ya no hay quiebra de la seguridad so- cial! La tasa de sustitución entre salarios últimos percibidos y pensión, empeora.
Según informes oficiales (Instituto Actuarios Españoles, Ministerio Trabajo,…), con todo este ciclo de reformas se logra transferir alrededor del 30% del gasto de pensiones (5% PIB)…hacia otras “necesidades” (del bloque dominado y no del bloque dominan- te). También los planes de previsión de pensiones (fondos y otros) logran transferencia de recursos del bloque dominado al bloque dominante (10-15% PIB en 2019 y se estimaría “necesario” llegar al 25%).
Sin la supresión de las Reformas de pensiones y las laborales estamos abocados y abocadas a que nos sigan recortando las pensiones públicas año tras año y alargando la vida laboral, sobre todo para los nacidos después de 1985, que perderán hasta más de un 40% de la pensión. Así mismo las viudas y pensiones no contributivas (mujeres en su mayoría), como decimos en este escrito , caminan hacia un estado meramente asistencial con unas rentas de “supervivencia”.
2020-11-2 BARAKALDO
